jueves, 24 de febrero de 2011

SINFONIA CALLEJERA


09:00 am, Los mendigos de la plaza de Armas duermen en distintos bancos de ella, la gente avanza con prisa a sus responsabilidades.

El aroma a café se escapa y seduce a quien se le cruza por el frente, mientras el sonar de los platos, tasas y cucharas, dan los primeros compases de esta sinfonía.
“Un perro ladra a una tienda”

14:00 pm, los restoranes se lucen mostrando sus apoteósicos platos del llamado “Menú” de la hora de almuerzo, le hay de variados gustos y composiciones, transgénicos, carnívoros y vegetarianos, todos ellos por la módica suma de alrededor de $2.590… una ganga para quien tiene un sueldo “Reguleque”.

“El perro sigue ladrando a la tienda con más agresividad”

19:00 pm, la misma gente de la mañana con cara de funeral, ahora en retorno, comienza la función, tome asiento y disfrute:

La Sinfonía Callejera presenta la opera:

1º Manifestación en contra del alza del medio de transporte, con la participación de los sopranos del comité de dueñas de casa, trabajadores y los barítonos del centro de estudiantes de Santiago.

2º Manifestación por la liberación de los presos políticos y el caso “Bombas”, con la interpretación de los tenores familiares de los presos mismos.

3º Réquiem de instrumentos de percusión y viento en las voces de jóvenes protestantes en contra de las Termoeléctricas.

“El perro se decide entrar a la tienda”

Auspiciadores:

Los carritos de Mote con huesillo, bebida criolla.
Maní Confitado.
Helados de máquina.
Súper 8 y otras golosinas.

Todo ello bajo la supervisión de los señores de verde, listos para imponer su justicia, si esta sinfonía, flaquea en los bajos o en los agudos…

Banderas de distintos ideales políticos, flamean y bailan como las garotas en el carnaval de Brasil… Las banderas son todas rojas y con insignias, no sé por qué…

El Perro ya no ladra a la tienda, ahora se alimenta con las sobras de comida que esta misma le beneficia.

Fin de la función, por lo menos por hoy.